No se ha visto ninguna cigüeña electrocutada, hecho que sí ocurrió en años anteriores.
El nido que antiguamente hubo en la torre, destruido al cambiar el tipo de cubierta, no volvió a ser reconstruido. Las condiciones ecológicas actuales de nuestro entorno no son aptas para mantener a una pareja de cigüeñas. Prácticamente toda la fauna que les proporcionaba alimento ha desaparecido, en concreto los anfibios en charcas y acequias debido a los residuos del alcantarillado y a la enorme cantidad de productos químicos esparcidos en los campos de cereales.
Tratándose de aves, curiosamente, en Marazovel han rotulado su bar como "Bar Ricotí".