La prensa nacional se hace hoy eco de la detención en Barahona de una persona, sorprendida por la Guardia Civil expoliando restos arqueológicos. Según la nota de prensa de la Delegación del Gobierno, la detención se produjo el 16 de noviembre de 2023, mientras portaba 15 piezas metálicas de interés arqueológico, un detector de metales y material para realizar excavaciones.
Tras la detención, se realizó también un registro en una propiedad de la familia del detenido cercana al Burgo de Osma (a más de 70 km de Barahona), donde intervinieron más de 1.000 piezas arqueológicas.
La información disponible hace pensar que el detenido no es vecino de Barahona, sino que se habría desplazado explícitamente a Barahona para realizar el expolio.
Esta persona contaría ya con numerosos antecedentes penales por delitos contra el Patrimonio Histórico en otros lugares de Soria, como el intento de expolio de otro yacimiento arqueológico en Santervás del Burgo (Soria).
En el caso de Barahona, la nota de prensa indica que la Guardia Civil estaba realizando las investigaciones desde hace meses, al haberse localizado en el lugar hoyos fruto de prospecciones ilegales.
Lamentablemente, según indican los expertos, la mera recuperación de los objetos expoliados no restaura el daño causado. Una vez que los objetos salen de su contexto, se pierde para siempre gran parte de la información histórica que nos podrían dar, por lo que su interpretación se hace mucho más complicada. Sería deseable que estos yacimientos arqueológicos, que se encuentran perfectamente catalogados desde hace décadas, fueran excavados y estudiados antes de que se pierdan para siempre.
La Guardia Civil destaca la importancia de la colaboración ciudadana para detectar de todo tipo de actividades ilícitas e identificar a sus autores. Recuerdan que el teléfono 062 de atención permanente se encuentra a disposición de los ciudadanos.
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