Un simple paseo con una cámara fotográfica de bolsillo, en el día adecuado de esta primera quincena de junio, me permite presentar estas imágenes.
Están captadas en las cercanías del camino de Bordecorex. Hay muchas
otras que no presento, por ser tan
abundantes, y otras porque su color verde homogéneo o por otra razón no
son estéticamente tan atractivas.
Hay muchas flores menos llamativas a la vista de los humanos, incluso menos agradables estéticamente, pero todas ellas cumplen su función. Al fin y al cabo, las flores están hechas para la reproducción de las plantas por los insectos, y los humanos poco tenemos que ver en ese asunto.
Esta flor, más escasa, estaba en la carretera de Alpanseque.
Pero sin duda, la "flor" más abundante está por salir y es sembrada. Se trata de los girasoles, que están naciendo en estas fechas y que esta campaña agrícola ocuparán una gran extensión de terreno.
Como contrapunto muestro flores poco atractivas para nuestro gusto estético, pero cumplen su cometido botánico: una flor de beleño y un cardo de tamaño respetable. La primera tiene propiedades tóxicas y medicinales y abunda en nuestro entorno. El tamaño del cardo se aprecia al compararlo con las pilas del lavadero.
1 comentario:
Pero las flores deben tener el nombre para uno saber como se llaman.
No creen🤔
Publicar un comentario